Durante la primera mitad del siglo XX, Edward Alexander Crowley fue considerado «el hombre más perverso del mundo» debido a sus prácticas ocultas.
Nació en Leamington, Warwickshire, en Gran Bretaña, el 12 de octubre de 1875. Era hijo de un industrial cervecero, muy religioso y puritano. Su fanatismo provocó en el pequeño Crowley el rechazo hacia la sociedad establecida y el deseo irrefrenable de transgredir todas las normas éticas, a pesar de que había estudiado en la Universidad de Cambridge. Crowley tenía además una fijación sexual morbosa que le hizo seducir a una criada a la edad de 14 años.
La iniciación de Aleister Crowley
A los 19 años, encontró un libro de magia titulado The Kabbalah Univeiled, reescrito por S.L. Mathers. Su lectura le abrió los ojos al universo del ocultismo. Su interés fue rápidamente acrecentado por otro libro: Magia Ceremonial, escrito por A.E. Waite, cuya lectura le inició en los secretos de la magia. En 1895, decidió separarse de sus orígenes, dedicarse a la magia negra y cambiar su nombre de pila por el de Aleister.