El chino mandarín es la lengua más hablada del mundo y uno de los idiomas más complicados para un occidental.
El idioma chino se compone de infinidad de dialectos siendo los más frecuentes, el ‘wu’, el ‘min’ y el
cantonés. Pero, sin lugar a dudas, es el
mandarín, derivado del dialecto de Beijing, quien se ha impuesto al resto de las lenguas dialectales ya que es el idioma oficial de la República Popular China y de Taiwán, además de ser cooficial en países como Singapur. En total, el chino mandarín es hablado por casi 1.000 millones de personas en todo el mundo.
Motivos para estudiar chino mandarín
El peso en el mundo de China hace imprescindible para las empresas mantener relaciones comerciales con este país y para ello, es necesario conocer su idioma. China es la segunda mayor economía del mundo con un mercado enorme donde existen en estos momentos grandes oportunidades para las
empresas: negocios de
importación y exportación, i
nversiones inmobiliarias, etc. La economía china crece a un ritmo desenfrenado, mucho más rápido que otros
países, generando millones de puestos de
trabajo cada año.
Dificultades para aprender chino
Comparado con el
inglés o
alemán, el chino es un idioma mucho más complejo pero no solo por su estructura oral y escrita, sino también por el propio desconocimiento que se tiene en Occidente de la cultura, historia y tradiciones chinas. Un conocimiento básico de las costumbres orientales es una buena base para un posterior estudio de su lengua ya que, de su cultura e
historia emana un vocabulario basado en la entonación donde muchas de las palabras no tienen un mismo significado que en Occidente. Así, por ejemplo “diversión” significa literalmente “caliente y ruidoso”.
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