"Rusia está señalada por el cielo para guiar los destinos de la mitad del globo”, decía Tocqueville. Ya desde Napoleón, su potencia militar se basaba en su tamaño y, a partir de la 2ª Guerra Mundial, además del tamaño, su fuerza se basó en su alto grado de preparación y en una tecnología puntera. Al día de hoy, el ejercito rojo es un ejército roto en vías de reparación.
Aunque diferentes medios de comunicación afines a Putin afirman lo contrario, lo cierto es que el poderío militar soviético de antaño nada tiene que ver con su estado actual.