Fué hace 50 años cuando Martin Luther King Jr., realizó uno de los discursos más memorables de la historia, y fue fuente de inspiración para generaciones futuras.
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Pocos discursos han alcanzado tanta popularidad como el proferido por Martin Luther King Jr en Washington, junto al monumento a Abraham Lincoln el 28 de agosto de 1963, durante la campaña por los derechos civiles de los negros.
Su discurso en la capital de Estados Unidos, compuesto por frases ya repetidas antes durante la citada campaña en varias ciudades, mantuvo cierto ritmo hasta que la cantante Mahalia Jackson, entre el gentío, próxima al palco de oradores, gritó a King: "Tell them about the dream, Martin (háblales del sueño, Martin)", y a partir de ese momento el orador, con cierto espíritu profético emocionó a la multitud.
Habituado a largas y efusivas intervenciones que tenían su espacio de expresión hasta ese momento en las iglesias evangélicas, Martin Luther King consiguió una espectacular repercusión en todo Estados Unidos y removió multitud de conciencias con su discurso. A partir de ese momento, se puede decir que comenzó el largo camino hacia la igualdad racial.
“Yo tengo un sueño, el sueño de que un día todos los hombres sean hermanos”. Con estas palabras inició su discurso Martin Luther King. Sin duda, un discurso único, un discurso para la historia por el que será siempre recordado.
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