Es uno de los más desgraciados sucesos de la historia reciente del ejercito español. Los fenómenos extraños acaecidos tras la tragedia aun son un misterio inexplicable.
11 de marzo de 1991, Cerler (Huesca). Un centenar de soldados se disponen a llevar a cabo unos ejercicios de alta montaña. Todos ellos son militares de la compañía de esquiadores del batallón de cazadores 3/65 de Barbastro.
La tragedia
El capitán ha desoído los partes meteorológicos y la tragedía se consuma en un punto denominado Blanca de Paderna. Un inmenso alud se precipita desde lo alto sepultando a los militares bajo la nieve y aunque la mayoría logran salvar la vida, desgraciadamente nueve militares fallecen.